Casos resueltos

En el mundo del misterio hay miles de casos y fenómenos que continúan llamando la atención y causando gran expectación entre sus seguidores a nivel mundial. Desde los llamados “ovnis invisibles”, los círculos de las cosechas o agroramas, hasta los animales críptidos son casos que siguen manteniendo en suspenso a más de un aficionado que cree que en este mundo hay algo más allá de lo que está escrito.

Pero, al parecer, son verdaderamente pocos los que saben que dentro del mundo del misterio hay varios casos resueltos e incluso casos cerrados, pero que siguen siendo sacados a la luz por distintos medios de comunicación, e “investigadores”, haciendo que la gente crea que siguen abiertos y sin respuesta, en pocas palabras, que siguen siendo un misterio, lo cual es falso. Recordemos que el principal objetivo de la investigación de todos los temas de misterio es desmitificarlos, así es, que dejen de ser misterios. Que en lugar de una gran e interesante duda, tengamos una mucho más certera y objetiva respuesta que de solución al fenómeno en cuestión.

Bueno, vayamos por partes. Muchos recordarán el famoso caso de los rods, sí, esos supuestos insectos que podían volar a velocidades impresionantes y que a simple vista no podían ser vistos, y que solo con la cámara de video se podía captar sus imágenes, mostrando el característico movimiento de sus alas, que describían un aparente movimiento ondulatorio. Pero al pasar de los años, y con el avance de la tecnología, se confirmó que tales criaturas no existían y que el fenómeno de la “transrodización”, como lo llama el investigador Leopoldo Zambrano, quien demostró que era lo que realmente generaba a ilusión óptica que da por resultado a los famosos rods. En conclusión los rods, no existen, solo es un efecto visual de las cámaras de video que genera al pasar frente al lente algunos insectos voladores comunes y corrientes, su imagen se alarga y da la apariencia de rods.

Las orbes son otro famoso fenómenos que en algunas partes siguen dando de que hablar. Para algunos se trataba de supuestas entidades etéreas o preternaturales que nos vigilan y que incluso pueden ser llamadas o invocadas. Pero todo esto resultó falso tras los descubrimientos realizados por varios investigadores, entre ellos el investigador Tomás Amador, quienes descubrieron que las orbes tan solo se trata de pequeñas partículas de polvo, polen, e incluso agua suspendidas en el aire, y que gracias al flash de las cámaras fotográficas dan la apariencia de pequeñas esferas que nos rodean, pero en realidad solo es el efecto visual causado por la luz del flash reflejado en esas partículas. Las orbes son un caso resuelto.



Otro fenómeno que ha sido de gran interés para algunos supuestos ufólogos, es el de los “ovnis invisibles” o “fortuitos” que tanto llamaron la atención en su momento, pero que algunos falsos investigadores siguen utilizando este mito para ganar fanáticos al tema de los ovnis. Estos falsos ovnis son las imágenes de aves, insectos, etc., que son captados accidentalmente en el momento de tomar una fotografía, el testigo dice que no lo vio al tomar la foto y que “misteriosamente” apareció al revisarla. Ese cuento ya está muy quemado por los seguidores de este mito. Varias investigaciones han demostrado, entre ellas las de la investigadora Ana Luisa Cid, que estos presuntos ovnis no merecen ese calificativo, pues tan solo se trata de aves, globos, insectos u otras cosas captadas sin que el fotógrafo en turno se percate de que están pasando frente a ellos. Eso denota falta de atención al tomar la foto, no es ningún fenómeno del otro mundo.



Un fenómeno más que ya ha sido debidamente desmitificado, pero que sigue causando expectación entre algunas personas, son los llamados agrogramas, círculos de las cosechas o señales de los pastizales. El mito decía que eran dibujados por ovnis y/o sus tripulantes en los campos de cosechas y pastizales para dejar un mensaje de “su presencia” en nuestro mundo, pero todo ha resultado ser un fraude. Numerosas demostraciones e investigaciones han confirmado que tan solo se trata de obras de arte de personas bien organizadas, y que todo es debidamente planeado para generar el mito. Desde el seleccionar el pastizal, ponerse de acuerdo con los dueños de este para que digan que no saben nada, hasta las ganancias que producirá las ventas de revistas y documentales sobre ese tema. En fin en todo un plan de mercadotecnia, pero es falso.

Más delante seguiré con otros temas y fenómenos que ya han sido debidamente resueltos y desmitificados. Pero por el momento, me despido.

¡Que tengas un desmitificante día!